al fin solas!!!
Hace ya unos días que vengo con un humor de remil perros rabiosos. Según Homero, "estar indispuesta" me pone mala mala.
Hoy llegué cansada de laburar y me di un baño de inmersión (con Homero que cada tanto abría la puerta del baño para comentarme cualquier estupidez, del tipo "acabo de ver en la tele un tipo que vomitó por aspirarse un cacho de wasabi, jojo!!" o bien "pregunta Fernando si la deja a la novia o no la deja, la deja no la deja, la deja no la deja" a lo cual respondí con terminantes "GRRRR...")
Luego, cuando salí de la ducha, el tipo tuvo una acción humanitaria y se encargó de la cena: 200 gr de jamón y 200 gr de queso, más unas aceitunas duras pero comibles al fin. Todo esto regado con un totín, y como era de esperar me clavé media botella. Al toque alguien se cuelga del timbre, me asomo al balcón y lo veo al bobo de Fernando sacando la cabeza del fiat 600 que maneja con orgullo ("daalleee enanooooo vamooo' a caaasaaaaaa"). Menos mal que el enano (a.k.a Homero) se portó como un duque y ahí nomás le gritó "perate que me estoy tomando un tinto con la gorda, tomá la llave, subí" acto seguido revolea las llaves por el balcón (sí, Fernando es el mismo nerd con el que, segun el post anterior, Homero se juntaba a "estudiar" y por ese motivo se perdía durante todo un día).
La cuestión que subió el cerdo y se terminó de tomar el poco vino que quedaba, no sin antes prenderse "del pico" de la mayonesa lo cual le costó un chirlo en la nuca e improperios de mi parte que ya estaba bastante curtida en ese momento "soltá la mayonesa, pedazo de cerdo, te digo que la sueltes!". Menos mal que Fernando vino con la novia ("la dejo, no la dejo, la dejo, no la dejo") y entre las dos los cuereamos a esos cerdos que jugaban videojuegos en la sala de al lado.
Idos de la casa el tal Fernando y su novia ("la dejo, no la dejo", le dije a la flaca que le arme el bolso al idiota ese y se lo deje en el palier apuntando para el hueco del asensor), me dice Homero: "me mandó un mensaje Reviglio (¿quién cuernos es reviglio?) que me pasa a buscar en 10 para ir a comer un asado". El tal Reviglio es un pibe que vivía con Homero junto a otros 3 o 4 nicoleños pajertos adolescentes hace un tiempo atrás.
La cuestión que recién estaba asomada al balcón mientras lo miraba a Homero subir a la camionetita del tal reviglio que tanto me vive hinchando con ese reviglio y le conozco hasta la neurosis por la "toallita del culo" a pesar de que nunca le vi la cara en la vida. Y se fue. ¡Se fue el lechón!
Ahora me puse un disco de murga al palo y tengo tanta felicidad que no sé qué hacer con toda la casa para mí sola, al fin sola!!!!! Pensaba, me puedo ir a la cama con la tele a ver una película, puedo correr y dar tumbas carneras por el comedor, puedo morder las almohadas hasta descuartizarlas, puedo orinar en todos los rincones de la casa si quiero... porque estoy sola y no puedo más de la felicidad del abandono del cerdo.
Siempre que Homero se va pienso que es mi oportunidad para bajar 10 kgs o bien para cambiar la cerradura o bien para armarle el bolso lleno de trastos informáticos y de placas y memorias y tornillos que están por toda la casa desparramados y ponérselos a su disposición apuntando desde el balcón a la vereda.
En fin, cosas que una sueña...
Hoy llegué cansada de laburar y me di un baño de inmersión (con Homero que cada tanto abría la puerta del baño para comentarme cualquier estupidez, del tipo "acabo de ver en la tele un tipo que vomitó por aspirarse un cacho de wasabi, jojo!!" o bien "pregunta Fernando si la deja a la novia o no la deja, la deja no la deja, la deja no la deja" a lo cual respondí con terminantes "GRRRR...")
Luego, cuando salí de la ducha, el tipo tuvo una acción humanitaria y se encargó de la cena: 200 gr de jamón y 200 gr de queso, más unas aceitunas duras pero comibles al fin. Todo esto regado con un totín, y como era de esperar me clavé media botella. Al toque alguien se cuelga del timbre, me asomo al balcón y lo veo al bobo de Fernando sacando la cabeza del fiat 600 que maneja con orgullo ("daalleee enanooooo vamooo' a caaasaaaaaa"). Menos mal que el enano (a.k.a Homero) se portó como un duque y ahí nomás le gritó "perate que me estoy tomando un tinto con la gorda, tomá la llave, subí" acto seguido revolea las llaves por el balcón (sí, Fernando es el mismo nerd con el que, segun el post anterior, Homero se juntaba a "estudiar" y por ese motivo se perdía durante todo un día).
La cuestión que subió el cerdo y se terminó de tomar el poco vino que quedaba, no sin antes prenderse "del pico" de la mayonesa lo cual le costó un chirlo en la nuca e improperios de mi parte que ya estaba bastante curtida en ese momento "soltá la mayonesa, pedazo de cerdo, te digo que la sueltes!". Menos mal que Fernando vino con la novia ("la dejo, no la dejo, la dejo, no la dejo") y entre las dos los cuereamos a esos cerdos que jugaban videojuegos en la sala de al lado.
Idos de la casa el tal Fernando y su novia ("la dejo, no la dejo", le dije a la flaca que le arme el bolso al idiota ese y se lo deje en el palier apuntando para el hueco del asensor), me dice Homero: "me mandó un mensaje Reviglio (¿quién cuernos es reviglio?) que me pasa a buscar en 10 para ir a comer un asado". El tal Reviglio es un pibe que vivía con Homero junto a otros 3 o 4 nicoleños pajertos adolescentes hace un tiempo atrás.
La cuestión que recién estaba asomada al balcón mientras lo miraba a Homero subir a la camionetita del tal reviglio que tanto me vive hinchando con ese reviglio y le conozco hasta la neurosis por la "toallita del culo" a pesar de que nunca le vi la cara en la vida. Y se fue. ¡Se fue el lechón!
Ahora me puse un disco de murga al palo y tengo tanta felicidad que no sé qué hacer con toda la casa para mí sola, al fin sola!!!!! Pensaba, me puedo ir a la cama con la tele a ver una película, puedo correr y dar tumbas carneras por el comedor, puedo morder las almohadas hasta descuartizarlas, puedo orinar en todos los rincones de la casa si quiero... porque estoy sola y no puedo más de la felicidad del abandono del cerdo.
Siempre que Homero se va pienso que es mi oportunidad para bajar 10 kgs o bien para cambiar la cerradura o bien para armarle el bolso lleno de trastos informáticos y de placas y memorias y tornillos que están por toda la casa desparramados y ponérselos a su disposición apuntando desde el balcón a la vereda.
En fin, cosas que una sueña...